Durante los últimos nueve años, México ha emergido como una potencia en el escenario mundial, consolidándose como uno de los destinos más atractivos para los negocios y la inversión. Esta ascensión se atribuye a una combinación de factores que van desde su estabilidad política hasta su ubicación geográfica estratégica. Sin embargo, uno de los elementos clave que ha impulsado su crecimiento es el fenómeno del nearshoring.
El nearshoring, una tendencia en aumento en la última década, ha llevado a las empresas a trasladar sus operaciones o producción a países cercanos a sus mercados objetivo. México ha capitalizado esta tendencia gracias a su estabilidad legal y económica, así como a sus acuerdos comerciales favorables que facilitan la entrada de empresas extranjeras. Con más de 50 tratados comerciales en vigor, incluido el recientemente renovado Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), México se ha convertido en un imán para la inversión extranjera.
Además de su entorno comercial favorable, México cuenta con una fuerza laboral altamente calificada, especialmente en áreas clave como tecnología, ingeniería y manufactura. La inversión en educación ha dado sus frutos, con instituciones que producen talento especializado y capacitado para satisfacer las demandas del mercado global.
El informe de Perspectivas Económicas y Bursátiles 2024 del Grupo Financiero Monex proyecta un crecimiento del 2.1% para la economía mexicana, impulsado por el avance del nearshoring y un aumento en el gasto público. Este pronóstico consolida a México como un destino atractivo para la inversión extranjera, marcando un año emocionante para el desarrollo económico.
Por otro lado, la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP) resalta un creciente interés en el sector inmobiliario industrial, especialmente en el norte de México, reflejando la confianza de las empresas extranjeras en el territorio nacional. Sergio Argüelles, director de AMPIP, anticipa un crecimiento en sectores clave como la industria automotriz, incluso en un año electoral. A pesar de que las elecciones puedan generar cierta incertidumbre, se espera que México continúe siendo un mercado atractivo para la inversión extranjera.
El nearshoring es una estrategia empresarial que implica la reubicación de procesos de producción o servicios a países cercanos geográficamente, en lugar de mantenerlos en ubicaciones más distantes o fuera del continente. Esta tendencia ha ganado popularidad en los últimos años debido a una serie de factores, incluyendo la creciente presión para reducir costos, la necesidad de una mayor agilidad en la cadena de suministro y el aumento de la demanda de productos y servicios personalizados y de calidad.
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